La hacienda La Sauteña se estableció en el siglo XVIII en el norte de Tamaulipas, México. A finales del siglo XIX, la hacienda adquirió una orientación empresarial bajo la dirección de Iñigo Noriega. En la década de 1990, se llevaron a cabo las primeras obras de restauración del edificio histórico de la hacienda con el apoyo del gobierno municipal y estatal.